El Ministerio de Consumo, de la mano con la Dirección General del Juego, demostró con cifras que cuando comenzó la pandemia se vio muy afectada la industria del juego, pero hubo un repunte donde se rompieron cifras históricas como el promedio mensual de gastos para una persona que llegó a pasar los 50 euros.
De igual modo, para ese momento se registraba un alza que marcaba los más de 687 mil usuarios activos.
Las apuestas en deportes lideraron el auge a tal punto que se robaron la atención del público. Estas cifras fueron arrojadas en el informe que se hace anualmente a todos los jugadores online. Más de un 1 millón de ciudadanos españoles (4.5% sobre el año pasado) apostaron en deportes en una crisis en la que incluso el mismo estaba prácticamente frenado. Incluso, alguna de esas apuestas se hizo en los eSports (deportes electrónicos).
El primer semestre de la pandemia fue realmente catastrófico y se tocaron pisos que nunca se habían tocado desde 2017, solamente 417 mil jugadores activos. Para diciembre la cantidad de usuarios era históricamente positiva y el 60% de los afiliados solo usaba un juego diferente, otro 30% prefería las apuestas en deportes, un 10% con póquer, 9% casino y solo 1% en bingo.
Los números más favorables del informe mencionado anteriormente son los del gasto promedio del jugador. Dicho gasto llegó a subir hasta un 18% y representar más de 600 euros por año. Las ganancias de los casinos online en España subieron un 28%.
Andrea Vota (director de la asociación que regula el juego en línea) afirma: “El juego online a veces tiene sus malos días, pero francamente se mantiene firme y en ascenso. Muchos creen que el aislamiento que ha significado la cuarentena ha beneficiado al juego en línea, pero esto no es cierto. El empuje que tuvo esta modalidad de entretenimiento ha sido mayormente por las apuestas en deportes”.
Aunque muchos dirigentes políticos españoles quieren enfrentar al juego, y sus diferentes modalidades, hay muchos datos que defienden esta modalidad de entretenimiento: El gasto promedio de los afiliados entre los 18 y los 25 años es de solo 280 euros por año. El balance de gastos y ganancias de los clientes se mantiene en los 100 euros, es decir un juego equilibrado.
Por último se destaca el aumento del uso de las carteras electrónicas para pagar las apuestas (17%), eso seguido un amplio 70% que aún lideran las tarjetas.